/ viernes 22 de marzo de 2019

REFLEJOS DE SOL

RELEVOS

La destitución fulminante de Armando Valladares, coordinador de policía en Salamanca (aunque dicen que sigue en el cargo), y de José Luis Santos Nápoles, secretario de Seguridad Ciudadana en la capital del estado, es un reflejo más de la grave crisis de violencia e inseguridad que padecen no sólo esos dos municipios sino el estado de Guanajuato en su conjunto.

VÍCTIMA

Valladares, en el caso salmantino, fue señalado por no haber realizado las pruebas de control y confianza, amén de que su cargo no tenía ningún sentido si se toma en cuenta que en Salamanca fue desmantelada la policía municipal y en su lugar opera (es un decir) el Mando Único que ha sido un rotundo fracaso, a tal grado que han desertado elementos de las FSPE.

NEFASTO

Por lo que toca a la capital del estado, desde la llegada a la SSC del general Santos Nápoles los índices de ejecuciones, robos, asaltos, etc., se dispararon en grado superlativo; la gota que derramó el vaso fue que el mílite intentó ocultar los homicidios dolosos “rasurando” los partes de novedades hasta que le cayeron en la movida. Este cuate ya no maquillaba, sino que de plano borraba la información.

QUITE

En la capital, por lo pronto, se ha designado a Samuel Ugalde García, quien regresa al cargo que ya había ocupado en Guanajuato; estuvo algunos meses en la banca, después de que fue secretario de Seguridad en el municipio de Irapuato hasta hace no mucho tiempo. Ugalde es gente de Carlos Zamarripa. Antes, el nombramiento del jefe policiaco de la sede de los poderes debía tener la aprobación del gobernador en turno. Ahora ya no.

NEGATIVA

Tanto el gobernador Diego Sinhue como el secretario de Salud, Daniel Díaz Martínez han pintado su raya ante la federación y por lo menos en Guanajuato ni en sueños piensan desaparecer el Seguro Popular. El sistema de salud de nuestro estado está fortalecido y sería un gravísimo error que por un capricho del “supremo y amado líder” se deje en el desamparo a más de 3 millones de guanajuatenses que dependen del Seguro Popular. Es cierto, hay fallas (“áreas de oportunidad", les dicen) pero en general hay calidad y calidez en el servicio.

GRITO

En más de un ochenta por ciento aumentaron en Irapuato los homicidios dolosos, durante el primer bimestre del 2019; esto, en comparación al mismo periodo pero del año pasado, según revela el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública al que no hay que creerle ni la mitad, porque luego sus estadísticas causan en las autoridades fuerte comezón y urticaria. Irapuato se ubica en primer lugar (seguido de León y de Salamanca) pero no puede ser, porque Fresópolis es el paraíso de la paz y el sosiego. ¡Cuál inseguridad! No seamos amarillistas.


RELEVOS

La destitución fulminante de Armando Valladares, coordinador de policía en Salamanca (aunque dicen que sigue en el cargo), y de José Luis Santos Nápoles, secretario de Seguridad Ciudadana en la capital del estado, es un reflejo más de la grave crisis de violencia e inseguridad que padecen no sólo esos dos municipios sino el estado de Guanajuato en su conjunto.

VÍCTIMA

Valladares, en el caso salmantino, fue señalado por no haber realizado las pruebas de control y confianza, amén de que su cargo no tenía ningún sentido si se toma en cuenta que en Salamanca fue desmantelada la policía municipal y en su lugar opera (es un decir) el Mando Único que ha sido un rotundo fracaso, a tal grado que han desertado elementos de las FSPE.

NEFASTO

Por lo que toca a la capital del estado, desde la llegada a la SSC del general Santos Nápoles los índices de ejecuciones, robos, asaltos, etc., se dispararon en grado superlativo; la gota que derramó el vaso fue que el mílite intentó ocultar los homicidios dolosos “rasurando” los partes de novedades hasta que le cayeron en la movida. Este cuate ya no maquillaba, sino que de plano borraba la información.

QUITE

En la capital, por lo pronto, se ha designado a Samuel Ugalde García, quien regresa al cargo que ya había ocupado en Guanajuato; estuvo algunos meses en la banca, después de que fue secretario de Seguridad en el municipio de Irapuato hasta hace no mucho tiempo. Ugalde es gente de Carlos Zamarripa. Antes, el nombramiento del jefe policiaco de la sede de los poderes debía tener la aprobación del gobernador en turno. Ahora ya no.

NEGATIVA

Tanto el gobernador Diego Sinhue como el secretario de Salud, Daniel Díaz Martínez han pintado su raya ante la federación y por lo menos en Guanajuato ni en sueños piensan desaparecer el Seguro Popular. El sistema de salud de nuestro estado está fortalecido y sería un gravísimo error que por un capricho del “supremo y amado líder” se deje en el desamparo a más de 3 millones de guanajuatenses que dependen del Seguro Popular. Es cierto, hay fallas (“áreas de oportunidad", les dicen) pero en general hay calidad y calidez en el servicio.

GRITO

En más de un ochenta por ciento aumentaron en Irapuato los homicidios dolosos, durante el primer bimestre del 2019; esto, en comparación al mismo periodo pero del año pasado, según revela el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública al que no hay que creerle ni la mitad, porque luego sus estadísticas causan en las autoridades fuerte comezón y urticaria. Irapuato se ubica en primer lugar (seguido de León y de Salamanca) pero no puede ser, porque Fresópolis es el paraíso de la paz y el sosiego. ¡Cuál inseguridad! No seamos amarillistas.


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