Luego de la explosión ocurrida en el estado de Hidalgo el viernes pasado, Gobierno del Estado reforzará la seguridad con el Ejército Mexicano y la Marina, en los más de 90 kilómetros de ductos de Pemex que corresponden a Guanajuato.

De acuerdo a Luis Ernesto Ayala, secretario de Gobierno, la instrucción del gobernador Diego Sinuhé Rodríguez Vallejo, fue intensificar el patrullaje y estar en estado de alerta ante cualquier contingencia.

“Estamos preocupados y lastimados por este hecho que no debió haber sucedido, sin embargo, desgraciadamente sucedió, por eso hoy estamos en mayor alerta en ese sentido”, comentó.

Dijo que hay puntos con mayor peligrosidad como la Barranca de Venaderos, por lo que desde hace una semana con la apertura del ducto se empezó a vigilar con más de 400 elementos de la Marina, la Policía Municipal, Estatal y Federal, así como el Ejército, para evitar cualquier contingencia.

En cuanto a si habría afectaciones en el suministro de combustible dijo que no, pues el ducto de Tula aún no se había abierto, aunque estarán atentos a cualquier información.

Además, informó que luego de las declaraciones de Rodríguez Vallejo donde abrió las puertas de los hospitales de Guanajuato para atender a las víctimas de la explosión, aún no han traído a ninguna, aunque instó que el Hospital Especial de Salamanca está a su disposición.

Por último, comentó que el abastecimiento de gasolina en el estado hasta ayer era de un 28%, pues de 603 gasolineras que hay están funcionando 167.

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