/ lunes 28 de agosto de 2023

El Espectador | Sospechas en torno al Secretario de Educación, Gerardo Monroy

El flamante equipo de Delfina Gómez se prepara para escudriñar exhaustivamente los negocios en torno a la Secretaría de Educación del Estado de México, bajo la dirección de Gerardo Monroy Serrano desde octubre de 2020.

Las fuentes nos confirman que las pesquisas se centrarán en propiedades y activos del funcionario, en medio de crecientes indagaciones por posibles irregularidades, incluyendo conflicto de interés.

Las dimensiones del caso son tan reveladoras que se prevé que el escándalo alcance incluso a la Fiscalía General de la República, bajo la mirada del discreto Alejandro Gertz Manero.

Desde hace algunos años, la designación de Monroy Serrano como Secretario de Educación en el Estado de México ha generado controversia y suscitado preguntas sobre su historial y patrimonio. En estos meses, la presentación de su declaración inicial el 27 de noviembre de 2020 ha desatado un análisis minucioso de su perfil y una serie de cuestionamientos.

De arranque, cuenta con una licenciatura en Administración de Empresas de la Universidad del Valle de México Campus Toluca y otra en Derecho de la Universidad Trilingüe de Estudios Universitarios. Aunque su experiencia laboral presenta diversos cargos en el sector público. Subsecretario de Desarrollo Municipal en la Secretaría General de Gobierno del Estado de México, con un periodo de servicio que abarcó desde el 15 de septiembre de 2017 hasta el 30 de noviembre de 2017. Director General en el Instituto Mexiquense de la Vivienda Social, donde ocupó el cargo en dos periodos diferentes: del 16 de junio de 2015 al 15 de marzo de 2017, y nuevamente del 26 de junio de 2017 al 15 de septiembre de 2017. Director General de Servicios Educativos Integrados al Estado de México, donde dirigió, planeó y ejecutó los programas educativos federales en el estado desde el 1 de diciembre de 2017 hasta el 30 de septiembre de 2020.

Y es que nadie se explica cómo se ha hecho de su cuantioso patrimonio con este paso por gobierno.

Según su declaración patrimonial, hasta antes de asumir el cargo en la Secretaría de Educación ya era dueño de cinco locales, cuatro de ellos adquiridos con pagos al contado; tres terrenos, dos comprados al contado; tres bodegas, también pagadas al contado; tres casas, una de ellas obtenida a través de una herencia, mientras que las otras dos a través de una operación de compra venta al contado y un departamento que adquirió mediante una cesión. Los 15 inmuebles, con valor total de 36.5 millones de pesos, habrían sido obtenidos por él, entre los años 1995 y 2020.

A lo anterior se suma que Monroy Serrano compró al contado un Chevrolet Suburban con valor de 549 mil 900 pesos en 2017 y en 2014 un Jeep Sahara del año, por 539 mil 400 pesos, también al contado. Además, posee joyas por un millón 675 mil pesos.

Datos del Registro Público revelan que adicionalmente, desde 2006 es dueño de Gruas Monvel, junto con otros tres socios y en julio pasado fundó la Sociedad Industrial KMM, SAPI de CV, donde es accionista de la mitad de la empresa, mientras que la otra mitad le pertenece a José Antonio Musi Salome.

El punto es que la mira de Delfina y su equipo apunta hacia la Secretaría de Educación del Estado de México, algo que ella conoce bien y puede servir para dar un buen golpe de arranque en su gobierno.

El flamante equipo de Delfina Gómez se prepara para escudriñar exhaustivamente los negocios en torno a la Secretaría de Educación del Estado de México, bajo la dirección de Gerardo Monroy Serrano desde octubre de 2020.

Las fuentes nos confirman que las pesquisas se centrarán en propiedades y activos del funcionario, en medio de crecientes indagaciones por posibles irregularidades, incluyendo conflicto de interés.

Las dimensiones del caso son tan reveladoras que se prevé que el escándalo alcance incluso a la Fiscalía General de la República, bajo la mirada del discreto Alejandro Gertz Manero.

Desde hace algunos años, la designación de Monroy Serrano como Secretario de Educación en el Estado de México ha generado controversia y suscitado preguntas sobre su historial y patrimonio. En estos meses, la presentación de su declaración inicial el 27 de noviembre de 2020 ha desatado un análisis minucioso de su perfil y una serie de cuestionamientos.

De arranque, cuenta con una licenciatura en Administración de Empresas de la Universidad del Valle de México Campus Toluca y otra en Derecho de la Universidad Trilingüe de Estudios Universitarios. Aunque su experiencia laboral presenta diversos cargos en el sector público. Subsecretario de Desarrollo Municipal en la Secretaría General de Gobierno del Estado de México, con un periodo de servicio que abarcó desde el 15 de septiembre de 2017 hasta el 30 de noviembre de 2017. Director General en el Instituto Mexiquense de la Vivienda Social, donde ocupó el cargo en dos periodos diferentes: del 16 de junio de 2015 al 15 de marzo de 2017, y nuevamente del 26 de junio de 2017 al 15 de septiembre de 2017. Director General de Servicios Educativos Integrados al Estado de México, donde dirigió, planeó y ejecutó los programas educativos federales en el estado desde el 1 de diciembre de 2017 hasta el 30 de septiembre de 2020.

Y es que nadie se explica cómo se ha hecho de su cuantioso patrimonio con este paso por gobierno.

Según su declaración patrimonial, hasta antes de asumir el cargo en la Secretaría de Educación ya era dueño de cinco locales, cuatro de ellos adquiridos con pagos al contado; tres terrenos, dos comprados al contado; tres bodegas, también pagadas al contado; tres casas, una de ellas obtenida a través de una herencia, mientras que las otras dos a través de una operación de compra venta al contado y un departamento que adquirió mediante una cesión. Los 15 inmuebles, con valor total de 36.5 millones de pesos, habrían sido obtenidos por él, entre los años 1995 y 2020.

A lo anterior se suma que Monroy Serrano compró al contado un Chevrolet Suburban con valor de 549 mil 900 pesos en 2017 y en 2014 un Jeep Sahara del año, por 539 mil 400 pesos, también al contado. Además, posee joyas por un millón 675 mil pesos.

Datos del Registro Público revelan que adicionalmente, desde 2006 es dueño de Gruas Monvel, junto con otros tres socios y en julio pasado fundó la Sociedad Industrial KMM, SAPI de CV, donde es accionista de la mitad de la empresa, mientras que la otra mitad le pertenece a José Antonio Musi Salome.

El punto es que la mira de Delfina y su equipo apunta hacia la Secretaría de Educación del Estado de México, algo que ella conoce bien y puede servir para dar un buen golpe de arranque en su gobierno.