Pasan las horas, los días y no hay certeza sobre donde acabará jugando La Fiera, aunque alternativas las hay, siendo Aguascalientes y Pachuca las más viables.
Si el deseo de la directiva que encabeza Jesús Martínez Murguía es continuar en el Estadio Nou Camp, no hay de otra más que sentarse a negociar con Roberto Zermeño, quien el pasado viernes a través de una carta filtrada en redes sociales manifestaba que el equipo podía mantenerse en su cancha, incluso sin el pago de una renta, aunque con la condición de darle acceso gratuito a la afición en caso de que ya se permitiera jugar a puerta abierta.
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Pero del lado esmeralda hay hermetismo total, tan sólo algunas publicaciones dirigidas hacia la afición y que a final de cuentas dicen poco y nada.
En caso de que el duelo ante América del próximo lunes 19 de octubre no se pueda celebrar en la “guarida”, la segunda opción sería trasladarlo al Estadio Hidalgo, casa del “hermano mayor” Pachuca, pero si la idea es evitar un traslado largo y estar mucho más cerca de casa, todo apuntaría hacia el Estadio Victoria de Aguascalientes, donde Necaxa recibirá el viernes a los “Xolos” de Tijuana.
Sin embargo, antes del partido de los varones está el conjunto femenil, que el miércoles tendría que recibir a las Chivas Rayadas del Guadalajara, partido pactado a las 9 de la noche y que incluso contará con transmisión televisiva, algo que Las Fieras no tuvieron en su más reciente encuentro como local frente al Atlas.
El asunto con el equipo que dirige Chava Bravo podría resolverse pasando el juego a las instalaciones de Casa Club, que cuenta con dos canchas de pasto natural y otra más de césped sintético, pero aquí el gran problema sería como resolver el compromiso con la televisora. No sería la primera vez que la femenil disputara un partido oficial en Casa Club, ya lo hizo en el Clausura 2018 ante Santos.
Debido a temas de certificación y uso de la tecnología para el VAR, los hombres no podrían jugar en sus canchas de prácticas y menos contra un rival de la envergadura de las Águilas, de tal forma que, si no es el Nou Camp, León está obligado a solicitar un cambio de sede ante la Liga MX y el inmueble elegido debe ser si o si de un club del máximo circuito.
