Juventud Rebelde, figura de la lucha libre mexicana, de origen irapuatense, quien fue asesinado el pasado martes, fue sepultado tras recibir una ceremonia religiosa y homenaje.
Gerardo García, también conocido como Jerry, fue velado el miércoles en un recinto funerario ubicado sobre la Calzada de Guadalupe. Al lugar acudieron más de 200 personas, entre amigos, familiares y compañeros del ring y su ataúd fue rodeado de flores y fotografías con mensajes para el ahora fallecido deportista.
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En la caravana hacia el panteón acudieron cientos de personas que, a pleno rayo del sol, caminaron y entonaron algunas canciones de banda interpretadas por el grupo musical Los Grandes de Guanajuato.
A la llegada al cementerio Guadalupano fueron colocados los arreglos florales y veladoras alrededor de la tumba, y algunos de los hijos y el padre de Gerardo dedicaron algunas palabras antes de dejar a Jerry en su última morada.
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Algunos luchadores asistieron al velorio y entierro y permanecieron firmes ante la organización de una marcha para exigir a las autoridades mejores condiciones de seguridad y justicia en el asesinato de Juventud Rebelde, ésto fue difundido también por su progenitor mediante sus redes sociales oficiales.
